Expertos en epidemiología en el país siguen preocupados, pues a pesar de las preocupantes alertas que han lanzado en los últimos meses, pareciera que la ciudadanía y hasta las autoridades no dimensionan los riesgos que enfrenta el país por cuenta del brote de hepatitis A que enfrenta actualmente.
Según el último informe epidemiológico del Instituto Nacional de Salud, Antioquia lidera con 916 casos, seguido por Cauca con 325 y Cali con 193.
El Valle de Aburrá, especialmente Medellín, ha experimentado un aumento del 300% en comparación con el mismo período del año anterior.
La hepatitis A es una infección viral que afecta el hígado. Una vez se contrae el virus, generalmente hay un periodo de incubación de aproximadamente 15 a 50 días. Las personas infectadas empiezan a experimentar síntomas como fiebre, fatiga, pérdida de apetito, náuseas, vómitos, dolor abdominal, orina oscura, heces de color claro y coloración amarillenta de la piel y los ojos (ictericia) por acumulación de los fluidos biliares en la sangre.
La vacunación es crucial para controlar el brote.
Las autoridades recomiendan lavarse las manos regularmente y realizar una adecuada manipulación de alimentos.
Una de las principales preocupaciones que enfrentan las autoridades de salud actualmente es que la presión al sistema de salud que genera esta epidemia, pues la principal afectada es la población adulta y está generando una tasa de hospitalizaciones mucho más alta de lo esperado, cerca del 31% de los casos confirmados.